No vivían juntos, Pero sí
que se acompañaban. Y ya lo creo que se acompañaban. Habían
desarrollado un lenguaje que los comunicaba a todas horas. Se intuían
y se amaban con una intensidad que fueron descubriendo de a poco..
Era la química de los polvos de las estrellas cristalizados en sus corazones, nada más y nada menos..
No hay comentarios:
Publicar un comentario