Buenas noches Yeca.
Lobo había acabado su primera semana en el Atlas. Quedaba por delante otra semana más .
Todo había transcurrido bien , salvo una caída de rodillas que le produjo dos grandes heridas que estaban cicatrizando muy bien . La ruta, y por primera vez el los doce años que iba yendo, fue extremadamente ventosa . Ahora estaba en un hotel de Marrakech y se pudo conectar por wifi . No había dejado de pensarla ni un sólo día .
Lobo se iba de viaje. Estará dos semanas fuera. Caminando por el Atlas marroquí. Dos semanas en las que la llevaría consigo, dentro , muy dentro, donde las entrañas, a ella, su Lagartija.
De
un beso de media mañana.
Del
tiempo en tus entrañas.
Del
bendito.
Once de abril.
Todo.
Donde las calas.
Bajo el Alisio.